Estos casos a veces se transmiten a través del contacto genital con genital, pero más a menudo a través del contacto oral con el genital. Al igual que aquellos con infecciones por Herpes tipo 2, aproximadamente dos tercios no experimentan síntomas y no saben que tienen herpes.
Síntomas tempranos
Los primeros signos de una infección por herpes genital tipo 1 generalmente aparecen entre dos y tres semanas después de la exposición a una pareja que tiene el virus. Los primeros síntomas de un brote de herpes que se aproxima incluyen picazón, hormigueo o dolor en el área genital o anal.
Algunas personas también pueden experimentar hinchazón y enrojecimiento inusual en el área afectada. Para las mujeres, los síntomas pueden desarrollarse en el área vaginal, el cuello uterino, el ano o los genitales externos y las nalgas.
Los hombres pueden desarrollar síntomas externamente en el pene, el escroto, las nalgas o los muslos, o dentro de la uretra o el ano.
Algunas personas también pueden experimentar hinchazón y enrojecimiento inusual en el área afectada. Para las mujeres, los síntomas pueden desarrollarse en el área vaginal, el cuello uterino, el ano o los genitales externos y las nalgas.
Los hombres pueden desarrollar síntomas externamente en el pene, el escroto, las nalgas o los muslos, o dentro de la uretra o el ano.
Síntomas de ampollas
Poco después de los primeros signos de hormigueo y dolor, aparecen uno o más pequeños bultos rojos. Estos bultos se convierten en ampollas ulceradas llenas de líquido. Las ampollas se abren, dejándolas húmedas, crudas y, a menudo, bastante dolorosas al tacto.
Pueden supurar líquido o un líquido sangriento y rojizo. Los hombres y las mujeres pueden experimentar ardor al orinar si las llagas se encuentran en un lugar que entra en contacto con el flujo de orina.
Enrojecimiento, hinchazón, dolor y sensibilidad en el área persisten en la región del brote, mientras que las llagas están abiertas, y las mujeres también pueden experimentar un flujo vaginal.
Poco después de los primeros signos de hormigueo y dolor, aparecen uno o más pequeños bultos rojos. Estos bultos se convierten en ampollas ulceradas llenas de líquido. Las ampollas se abren, dejándolas húmedas, crudas y, a menudo, bastante dolorosas al tacto.
Pueden supurar líquido o un líquido sangriento y rojizo. Los hombres y las mujeres pueden experimentar ardor al orinar si las llagas se encuentran en un lugar que entra en contacto con el flujo de orina.
Enrojecimiento, hinchazón, dolor y sensibilidad en el área persisten en la región del brote, mientras que las llagas están abiertas, y las mujeres también pueden experimentar un flujo vaginal.
Pueden supurar líquido o un líquido sangriento y rojizo. Los hombres y las mujeres pueden experimentar ardor al orinar si las llagas se encuentran en un lugar que entra en contacto con el flujo de orina.
Enrojecimiento, hinchazón, dolor y sensibilidad en el área persisten en la región del brote, mientras que las llagas están abiertas, y las mujeres también pueden experimentar un flujo vaginal.
Síntomas parecidos a la gripe
El primer brote de herpes genital a veces también se acompaña de síntomas parecidos a la gripe, que incluyen dolores musculares, fiebre, dolor de cabeza y ganglios linfáticos inflamados en el área de la ingle.
En algunos casos, una segunda cosecha de llagas puede aparecer junto con síntomas continuos similares a los de la gripe.
El primer brote de herpes genital a veces también se acompaña de síntomas parecidos a la gripe, que incluyen dolores musculares, fiebre, dolor de cabeza y ganglios linfáticos inflamados en el área de la ingle.
En algunos casos, una segunda cosecha de llagas puede aparecer junto con síntomas continuos similares a los de la gripe.
En algunos casos, una segunda cosecha de llagas puede aparecer junto con síntomas continuos similares a los de la gripe.
Síntomas curativos
Las úlceras por herpes eventualmente dejarán de supurar y desarrollarán una costra seca o costra donde alguna vez estuvo la ulceración húmeda.
Nueva piel se forma debajo de la costra, y eventualmente la costra se cae para completar el proceso de curación. Aunque la nueva piel puede ser un poco más blanda y más roja en apariencia que la piel circundante, otros síntomas dolorosos habrán disminuido.
Después de que las llagas del herpes se hayan curado, es posible que los brotes de herpes genital puedan reaparecer. Sin embargo, los brotes genitales de HSV-2 recurren diez veces más a menudo que el Herpes tipo 1 genital.
Los estudios de investigación han demostrado que el número promedio de brotes recurrentes en aquellos con Herpes tipo 1 genital es de cero a uno.
Por lo tanto, muchas personas con Herpes genital tipo 1 nunca pueden tener otro brote después del brote inicial, y aquellos que lo hacen pueden experimentar síntomas relativamente menores en comparación con el primer brote.
Las úlceras por herpes eventualmente dejarán de supurar y desarrollarán una costra seca o costra donde alguna vez estuvo la ulceración húmeda.
Nueva piel se forma debajo de la costra, y eventualmente la costra se cae para completar el proceso de curación. Aunque la nueva piel puede ser un poco más blanda y más roja en apariencia que la piel circundante, otros síntomas dolorosos habrán disminuido.
Nueva piel se forma debajo de la costra, y eventualmente la costra se cae para completar el proceso de curación. Aunque la nueva piel puede ser un poco más blanda y más roja en apariencia que la piel circundante, otros síntomas dolorosos habrán disminuido.
Después de que las llagas del herpes se hayan curado, es posible que los brotes de herpes genital puedan reaparecer. Sin embargo, los brotes genitales de HSV-2 recurren diez veces más a menudo que el Herpes tipo 1 genital.
Los estudios de investigación han demostrado que el número promedio de brotes recurrentes en aquellos con Herpes tipo 1 genital es de cero a uno.
Por lo tanto, muchas personas con Herpes genital tipo 1 nunca pueden tener otro brote después del brote inicial, y aquellos que lo hacen pueden experimentar síntomas relativamente menores en comparación con el primer brote.
Los estudios de investigación han demostrado que el número promedio de brotes recurrentes en aquellos con Herpes tipo 1 genital es de cero a uno.
Por lo tanto, muchas personas con Herpes genital tipo 1 nunca pueden tener otro brote después del brote inicial, y aquellos que lo hacen pueden experimentar síntomas relativamente menores en comparación con el primer brote.
Síntomas indetectables
Muchas personas no saben que tienen herpes genital tipo 1 porque no notan síntomas manifiestos. Sin embargo, incluso en ausencia de síntomas, el HSV-1 puede "mudarse" a través de la superficie de la piel y aumentar la probabilidad de contagio a través del contacto oral-genital o genital-genital. Esto se conoce comúnmente como vertimiento viral.
El herpes genital causado por Herpes tipo 1 produce mucho menos desprendimiento de virus que el herpes genital causado por Herpes tipo 2
Sólo alrededor del 25 por ciento de las personas con Herpes tipo 1 genital arrojan cualquier virus en ausencia de síntomas, en comparación con el 55 por ciento de las personas con Herpes tipo 2.
Con el tiempo, las tasas de diseminación viral disminuyen aún más. Sin embargo, usar condones de látex y evitar el contacto sexual varios días antes y después de un brote puede ayudar a minimizar el riesgo de transmisión del virus.
Muchas personas no saben que tienen herpes genital tipo 1 porque no notan síntomas manifiestos. Sin embargo, incluso en ausencia de síntomas, el HSV-1 puede "mudarse" a través de la superficie de la piel y aumentar la probabilidad de contagio a través del contacto oral-genital o genital-genital. Esto se conoce comúnmente como vertimiento viral.
El herpes genital causado por Herpes tipo 1 produce mucho menos desprendimiento de virus que el herpes genital causado por Herpes tipo 2
Sólo alrededor del 25 por ciento de las personas con Herpes tipo 1 genital arrojan cualquier virus en ausencia de síntomas, en comparación con el 55 por ciento de las personas con Herpes tipo 2.
Con el tiempo, las tasas de diseminación viral disminuyen aún más. Sin embargo, usar condones de látex y evitar el contacto sexual varios días antes y después de un brote puede ayudar a minimizar el riesgo de transmisión del virus.
Sólo alrededor del 25 por ciento de las personas con Herpes tipo 1 genital arrojan cualquier virus en ausencia de síntomas, en comparación con el 55 por ciento de las personas con Herpes tipo 2.
Con el tiempo, las tasas de diseminación viral disminuyen aún más. Sin embargo, usar condones de látex y evitar el contacto sexual varios días antes y después de un brote puede ayudar a minimizar el riesgo de transmisión del virus.
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